Esclavo sin cadenas, soy amante,
que viaja por el mundo de tus sueños,
saciando los deseos más pequeños
lo mismo que un pecado delirante.
Y en mar de la pasión soy navegante,
llevando en la bodega sólo leños
que aviven a los fuegos ribereños,
logrando la avidez del principiante.
Me visto con harapos de cordura
después de amanecer entre tus brazos
con la piel aromada de mujer.
Y al libar de tus labios la dulzura
mientras zurzo paciente los pedazos,
me refleja el espejo a Lucifer.
Me visto con harapos de cordura
ResponderEliminardespués de amanecer entre tus brazos
con la piel aromada de mujer.
Muy lindo Miguel. Abrazos!!
Hermoso!,feliz año!!
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